Permaneciendo del lado seguro

Las bibliotecas de UTRGV toman precauciones

Brigitte Ortiz | THE RIDER

La Biblioteca de la Universidad tendrá computadoras, acceso a impresoras y espacios abiertos para estudiar manteniendo el distanciamiento social durante este semestre. Las medidas de seguridad se han puesto en marcha por el coronavirus.

Paul Sharpe, decano de la Biblioteca de la Universidad, dijo que no están proporcionando salones para estudio grupal o individual ya que estos toman tiempo y trabajo atentivo para mantenerlos limpios.

“Tampoco estamos prestando libros por el momento, por la misma razón”, Sharpe dijo. “También es muy difícil mantener limpios a la mayoría de nuestros materiales de impresión, especialmente para las cosas como course reserve, que usualmente significa que un estudiante viene y toma prestado un libro por una hora o dos y, después lo regresa. Es muy difícil poder limpiar y después tenerlos listos y disponibles para el siguiente estudiante”.

Él dijo que están trabajando con el docente y los instructores para eliminar cualquier necesidad de estar usando libros impresos. Ellos se asegurarán de escanear y digitalizar este material para que los profesores lo puedan subir a Blackboard.

“Se ha instalado plexiglás en todos nuestros puntos de servicio para proporcionar una barrera entre personal y alumnos durante sus interacciones”, Sharpe dijo. “Estamos trabajando muy cerca con [Mantenimiento de Edificios]. Están haciendo limpieza adicional en algunas de las áreas de gran uso público, elevadores, escaleras, pomos de puertas. La biblioteca en sí está limpiando todas las sobremesas, las computadoras que se están usando, las impresoras, los escáneres que están alcanzables para el uso público, todo esos se limpian varias veces al día”.

Él dijo que la biblioteca del campus de Edinburg tiene un límite de ocupación de alrededor de 175 estudiantes. Sólo el segundo y tercer piso estarán disponibles. En el campus de Brownsville el número límite de estudiantes es de 140.

“Si alcanzamos ese límite, vamos a parar personas en la puerta, avisarles que ya alcanzamos nuestra capacidad y, darles, ya sea, sugerencias a que otros lugares pueden ir, como otros laboratorios de informática en el campus, si eso es lo que necesitan”, Sharpe dijo.

Él dijo que es difícil para la biblioteca porque les gusta ser el “eje central para los campus”.

“Es muy común en las primeras semanas de clases que los estudiantes lleguen y esperen por sus clases siguientes [o] se junten con sus amigos”, Sharpe dijo. “Así que estamos cambiando la complexión de la biblioteca al hacer que no sea un espacio social y en realidad que el enfoque sea simplemente ir a la escuela”.

Él dijo que los estudiantes deben usar su protección facial y asegurarse de que necesiten ir físicamente a la biblioteca.

–Traducido por Paulina Longoria